jueves, 13 de diciembre de 2012

UNA CAJA OLVIDADA

Me he acordado de tí 
al leer una carta 
que estaba dentro 
de una caja olvidada. 

Recuerdos y fetiches que guardamos y no tiramos. 
Estaba la chaqueta que vestía mis ideas. 
Me la he vuelto a poner 
y he ido al bar 
donde nuestros problemas encontraban respuestas. 
Ya no está el futbolín, ni aquel viejo gruñón 
que nos servía absenta en medio de nuestras tormentas. 

Entonces no nos planteábamos el suicidio 
tampoco veíamos colores tristes. 
Todos brillaban. 
Todos eran felices. 

El sol nos cegaba 
mientras nosotros lo mirábamos 
y sonreíamos felices. 

Ya no van a cenar las enfermeras del hospital. 
Han salvado sus vidas entre morfina y champagne.